Sunday, December 19, 2004

Archivodeportes.com


Verso a verso, como canta Serrat, o Paso a Paso, frase futbolera made in Mostaza Merlo, reflejan las realidades de los equipos que luchan diariamente por seguir existiendo. Vaya si el fútbol tiene inquietudes y una de ésas tiene que ver con los clubes de la categoría D, donde todo cuesta el doble, donde se juega casi "por el pancho y la coca" y muchos la utilizan para despuntar el vicio. Resulta que los equipos que finalizan en la última posición una vez terminado el torneo, según reglamentación de la AFA, son desafiliados por un año. Pero, ¿Qué hacen sus jugadores, técnicos y empleados? ¿Sigue abierto el club? Deportes.com estuvo con uno de los clubes que vivió esta experiencia, el Deportivo Paraguayo, un símbolo de toda una comunidad.
La sede del club, ubicada en la calle Piedras al 1600, llama la atención por el escudo del Deportivo Paraguayo que custodia la puerta de ingreso. Desde 1985, cuando fue adquirida con gran esfuerzo por la comunidad paraguaya, esta sede es uno de los lugares de encuentro que tienen sus socios. Precisamente ése fue el objetivo por el cual se creó este club, allá por el año 1961, cuando se incorporó a la AFA. Mario Areco, vocal titular de la actual Comisión Directiva, le abrió las puertas muy gentilmente a Deportes.com. Este hombre que hace 22 años que dedica gran parte de su vida a la institución, habla con orgullo del club: "la colectividad paraguaya se ha integrado satisfactoriamente en la sociedad argentina y han aprendido a convivir sin mayores inconvenientes. Diría que se integró hasta con facilidad en todos los aspectos: social, cultural, económico y también en el deportivo". Enseguida surge la pregunta de si el club recibe o recibió ayuda de parte de alguna entidad paraguaya. "En este último tiempo, después de varios años de tener gobiernos democráticos, hubo un acercamiento entre la comunidad paraguaya en la Argentina y el Estado paraguayo. Lo que ocurre es que siempre se ha tomado a la comunidad paraguaya en el exterior como enemigo político, que tiene su explicación en las primeras corrientes migratorias, que sí tenían ese origen. Es muy difícil cambiar ese concepto, pero ojalá dentro de un tiempo eso se borre". Claro que una ayuda no le vendría nada mal al Deportivo Paraguayo para que finalmente pueda tener su propia cancha. En una época en la cual Arsenal y Argentinos estrenaron cancha y el Estadio Único de La Plata sigue siendo un gran monumento, la cancha de Liniers debe ser alquilada por el club para afrontar sus compromisos cada fin de semana. Igualmente, Mario no pierde el sueño de poder construir la cancha en el predio que poseen en González Catán, en el Km. 28, 5 de la Ruta 3. "El deseo del Deportivo y su gente", aclara.
Uno de los grandes problemas que tiene el club, es el cobro de la cuota mensual de sus socios, unos aproximadamente 5.000, pero de los cuales 500 tienen la cuota al día. "El principal problema es que la gente de la comunidad está repartida en distinos lugares de Capital y Gran Buenos Aires y eso perjudica a la hora de hacer efectivo el cobro de los $ 8 que vale la cuota, por lo que el presupuesto que maneja el club ronda los $ 7.000 (de acá sale el pago de viáticos a los jugadores y premio mínimo por puntos obtenidos).
En lo que tiene que ver con lo futbolístico, el Deportivo ha subido y bajado de categoría a lo largo de su historia. Tocó el cielo con el torneo obtenido en la temporada 91/92 de la mano del "Ciego" García, quien paradójicamente le hizo un jucio al club que aún en la actualidad intentan terminar de pagar. Ése fue el ascenso a la Primera C, donde lograron jugar la final con Argentino (Q) y no pudieron seguir creciendo por cuestiones del destino y la caprichosa. Claro que en ese equipo estaba quien fuera uno de los máximos ídolos del club, el panameño Julio César Dely Valdés. Sí, el mismo que se lució en el Cagliari, Paris (SG), Oviedo y Málaga, entre otros. "Estuvo dos temporadas aquí y se notaba que era un jugador diferente, de otra categoría. Además tenía un ángel especial, una simpatía natural que lo hacía querido hasta por los rivales. Dejó un gran recuerdo aquí", sostiene Areco, a quien todavía le dura la bronca por esa final y por no haber podido cobrar, luego de 12 años, los U$S 25.000 que les debe el Nacional de Montevideo luego la venta del goleador. Otro que supo vestir la camiseta del Deportivo es el actual lateral izquierdo de Banfield, Cristian Tavio, quien es argentino hijo de paraguayos. Y en ese equipo que fue campeón tuvo gran participación el preparador físico en ese entonces, el Profe Fleitas, quien se consagró campeón con el Newell´s del Tolo Gallego. Igualmente sostiene que las dos desafiliaciones que sufrió el club fueron causa de las dificultades económicas. La última vez fue en el 2001, cuando tuvieron que ver el torneo como espectadores. Pero la vida no termina ahí. "El club como institución se mantiene abierto y lo que trata de hacer es equilibrar el gasto futbolístico con la cesión de jugadores, lo que les permite obtener oxígeno en lo económico y rearmarse para volver con todo. A los jugadores que no nos interesan les damos el pase libre para que puedan ir a jugar a otra parte". Responde sin vacilar a la pregunta de si la desafiliación es un buen castigo por parte de la AFA: "Darle un año de respiro a la institución en la parte futbolística es una buena medida porque permite que las entidades se reorganizen y vayan en búsqueda de jugadores".
La tragedia en Paraguay no pasó por alto para el club, que abrió sus puertas a la comunidad para cualquier ayuda. "Fue una tragedia fuera de lo común pero que demostró la solidaridad de la comunidad paraguaya y también de la argentina. Fue lo único satisfactorio como respuesta de las comunidades. Proporcionalmente creo que fue superior a lo de las Torres Gemelas por la cantidad de víctimas, tendiendo en cuenta la cantidad de muertos por habitante. La comparación no es mala", refuta Mario con cierto grado de nostalgia.
Por último, el sueño que desvela a Mario Areco es el de poder llegar en corto plazo a jugar en el Nacional B: "Hemos evolucionado como dirigentes, hemos aprendido la convivencia democrática y cada día nos integramos más. Si logramos el acercamiento a la comunidad paraguaya vamos a ser un club muy importante por la cantidad que somos, lo deportistas y lo identificado que estamos con nuestras culturas. Por eso, no suena descabellado soñar con un Nacional B". El mensaje del Sr. Areco es válido para todos los aspectos de la vida: "con esfuerzo y voluntad todo se puede. Cada día se puede aprender un poco más y subir un escalón. Nada es imposible si se quiere". De esta manera pasó el Deportivo Paraguayo, un club con mucha historia que es el ejemplo a la voluntad y el sacrificio. Un tributo a la vida.